¿Integrar la educación mediática a la escuela?

3/03/2013 0 Comments

No es ninguna novedad que el conocimiento está cambiando permanentemente y los sistemas educativos no han cambiado —tan rápidamente— como el resto de la sociedad, aún observamos que la escuela está cerrada al mundo exterior y los profesores prefieren olvidar que los medios de comunicación existen.


Hoy nuestra sociedad sumergida en la cultura mediática exige nuevas formas de aprender y enseñar, de leer y escribir; porque la información del mundo (gracias al incesante desarrollo tecnológico) nos llega cada vez con mayor frecuencia en diferentes formatos y soportes. Aunque los mensajes de los medios de comunicación parecen evidentes, en realidad, hacen uso de un “propio lenguaje” que toda persona debiera aprender para ser capaz de navegar inteligentemente a través de esta cultura “multimedial” o de varios medios, por ello se necesita integrar la educación mediática a la escuela y que —en su primer paso— nos enseñe a comprender con fluidez la “lectura” y “escritura” del lenguaje de la imágenes y los sonidos, de la misma manera como hasta ahora se ha enseñado a “leer” y a “escribir” en el lenguaje de la comunicación escrita.

Lamentablemente la relación entre la escuela y los medios de comunicación, no ha sido la mejor, se ha movido más cerca de la desconfianza y de la condena que de la aceptación y el reconocimiento. La televisión, sobre todo, ha sido calificada por la escuela como un “enemigo poderoso”, cuya influencia, por lo general negativa y manipuladora, debería combatirse. Tal actitud proteccionista y defensiva se enfrentó a quienes, en el extremo opuesto, se mostraban entusiasmados por el potencial ilimitado de los medios, considerándolos como una oportunidad para la democratización del saber y de la cultura, y como una expresión de la diversidad cultural y de la multiplicidad de manifestaciones sociales. Ambas actitudes conviven aún hoy dentro de un mismo sistema educativo, e incluso, con frecuencia, dentro de una misma escuela.

Entonces, la educación en medios no puede entenderse como protección, condena o idealización. Una educación en medios no basa sus principios en salvar o en proteger a los estudiantes. No se trata de censurar el placer ni de condenar a los alumnos por sus elecciones. Por el contrario, la educación en medios busca entender esa relación entre los medios y las audiencias, analizar la manera en que los medios representan la realidad, y el modo en que las audiencias incorporan y resignifican los mensajes.

Bibliografía 
Ferrés, J. (1994). Televisión y educación. Barcelona: Paidós.
Morduchowicz, R. (2003). El sentido de una educación en medios. Revista Iberoamericana de Educación.


Asociación de Comunicadores Escolares del Sur Peruano
ACESP-ONGD