¿Los juegos en internet son malos o ser vicioso de ellos es el problema?

Estamos investigando a compañeros de los diferentes “coles” en nuestra ciudad sobre el vicio de los juegos en internet para luego preparar una pequeña campaña radial a favor de todos los estudiantes que en algún momento se ven entrampados en este mundo.

Sabemos que hay juegos con una orientación positiva y hasta educativa pero hay otros juegos que son muy violentos y que creo no aportan nada a uno. En mi tarea de investigación conocí a un joven que llamaremos David y nos cuenta su historia.


Hola soy David, tengo 21 años y llevo 3 años postulando a la universidad, hasta el momento no logro ingresar, ahora estoy en una academia preparándome para postular nuevamente pero no es lo mismo como en el cole; esto me pasa porque años atrás yo dedique mi tiempo de estudios en cosas que no me sirvieron en la vida como el “starcraft”.

En la primaria yo era un chico estudioso, inteligente y respetuoso, todo esto lo perdí cuando entre a la segunda etapa de mi vida “el cole”, ahí conocí “otros amigos” que se volvieron viciosos a los juegos de internet, yo estaba en contra del vicio pero semanas después yo me sentí excluido del grupo, para que me consideren uno de ellos tuve que aprender a jugar porque si no iba con ellos me decían jergas como: pollo, cobarde o chupado.

Conforme transcurría el tiempo me empezó a gustar los juegos en internet y llegue al punto en que si dejaba de ir a las cabinas de internet a jugar sentía que me faltaba algo, a veces ya no iba al cole, no llegaba a casa, mis padres me esperaban con el plato en la mano, mi hermana me venía a buscar de noche por las cabinas de internet y en una de ellas le paso algo que la marcó para toda su vida y prefiero no contarlo, aún así empecé a beber licor, me convertí en un maestro de los juegos en internet y en el cole en el más respetado.

Me sentía muy bien en ese momento, era famoso en mi cole, todos me llamaban para ir a jugar, todos me respetaban, me invitaban a los mejores restaurantes, comía de lo mejor y ya no me gustaba lo que mi madre cocinaba. Ahora ya no hay nadie que me espere con un plato de comida, o alguien que me espere de noche.

Si les cuento mi historia no es para hacerme famoso sino para llegar a sus corazones, recordarles que “el tiempo es oro” sé que nunca es tarde para empezar de cero y es por eso que estoy comenzando a cambiar mi vida, amig@ se un ángel con alas y que nadie te las corte.

Esta historia me sirvió para reflexionar acerca de muchas cosas, espero que también te ayude a ti.

Escrito por:
Comunicadora Escolar
LIZBETH Y. ESCOBAR TICONA
I.E.S. José Carlos Mariátegui
Ilave


Asociación de Comunicadores Escolares del Sur Peruano
ACESP-ONGD

2 comentarios:

  1. El mensaje que daria a todos los jovenes y niños, no te apresures en crecer, mas cuando lo hagas ya no seras tan libre como lo eres ahora.

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  2. zhi ps zi estahmos en el fangho de stho de de ser viciosos del juegho devemos vatir nuestras alas ii salir de ellas........
    Ala gran mayoria sule sucedernos esto pero lo bueno es tener k salir de los problems..aveces parece lindo divertido cuANBDIO en realidad no nes asi SUELE TENER UN ANTIFAS k cuando te lo kithas es aveces demasiado tarde .............atte gilditha
    sighe adelante lizbeth

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